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Prosegur obtiene un beneficio neto consolidado de 45 millones de euros en los nueve primeros meses de 2020
Los ingresos han alcanzado los 2.620 millones de euros, excluyendo resultados extraordinarios del ejercicio, con un crecimiento orgánico positivo, a pesar del fuerte impacto de la COVID-19. Sin embargo, la facturación muestra el efecto negativo de la tasa de cambio y se sitúa en un 15,4% menos.
Madrid, 5 de noviembre de 2020 .- Las ventas de Prosegur han alcanzado los 2.620 millones de euros en los nueve primeros meses de 2020, lo que representa un 15,4% menos con respecto al mismo período del año anterior. Esta cifra ya refleja las desconsolidaciones de las ventas del negocio de Seguridad en Francia, cuya venta se completó el pasado 1 de octubre, y del negocio de Alarmas en España que ahora está operado junto a Telefónica a través de la compañía Movistar Prosegur Alarmas.
Al igual que en trimestres anteriores, las operaciones vuelven a reportar un ligero crecimiento orgánico positivo del 0,7%, poniendo de manifiesto la resiliencia del negocio frente al contexto de la pandemia. Sin embargo, la tasa de cambio de las divisas vuelve a suponer un impacto negativo en la facturación.
El EBITA reportado alcanza los 176 millones de euros en los nueve primeros meses del año, un 29,2% menos. Mientras que el margen EBITA alcanza el 6,7%. Excluyendo los planes de eficiencia llevados a cabo en Prosegur Cash, el EBITA se sitúa en los 201 millones de euros con un margen EBITA del 7,7%. De esta forma, el margen EBITA recurrente logra niveles cercanos a los del mismo período de 2019.
Prosegur ha logrado un beneficio neto de 55 millones de euros en los nueve primeros meses del año 2020, un 52,9% menos. El resultado neto consolidado, descontando los intereses minoritarios, fue de 45 millones de euros, un 45,6% menos. Como ya se indicó en el primer trimestre, de acuerdo con las normas de contabilidad (IFRS10.25), Prosegur debe registrar el impacto, no recurrente y extraordinario, de la venta del 50% de su negocio de Alarmas en España a Telefónica el pasado mes de febrero. Así, y debido principalmente a esta operación, Prosegur debe reflejar contablemente un resultado neto consolidado en el período de 337,1 millones de euros. La operación con la compañía de telecomunicaciones no ha tenido ningún efecto en la caja de Prosegur ya que el pago se realizó en su totalidad en acciones de la compradora.
En cuanto a la posición financiera, Prosegur sigue mejorando de manera significativa su generación de caja operativa, favorecida por la eficiencia en los cobros y la contención del gasto. Con ello, el flujo de caja operativo alcanzó los 209 millones de euros y representa un ratio de conversión de EBITDA en caja del 80,2%, tras normalizar el impacto de la norma IAS 16.
Por último, la deuda financiera neta del grupo se ha incrementado levemente debido al programa de recompra de acciones propias, la desinversión en Francia y el deterioro temporal del resultado. Así, el importe se eleva hasta los 920 millones de euros al final del tercer trimestre de 2020, excluyendo el impacto de la norma IAS 16. El nivel de endeudamiento se ha colocado en un ratio de deuda financiera neta sobre EBITDA de 2,3 veces, mientras que el coste medio de la deuda corporativa ha seguido reduciéndose hasta el 1,13%.
Finalmente, cabe señalar que Prosegur ha renovado en el mes de octubre su rating, por parte de Standard & Poor’s, con la calificación BBB y perspectiva estable.
En cuanto a la evolución de la actividad por líneas de negocio:
Prosegur Security
Prosegur Security, el negocio de vigilancia y tecnología, ha registrado unas ventas de 1.318 millones de euros, un 15,3% menos que el mismo período del año pasado. Esta cifra excluye la facturación del negocio de ciberseguridad y la actividad en Francia, cuya venta se completó el pasado 1 de octubre. La actividad de esta unidad se ha visto afectada por la ralentización general de todas las economías de los mercados en los que opera. A pesar de ello, en España y Brasil se observa una incipiente recuperación de volúmenes, con mejoras de rentabilidad.
En cuanto a las ventas de soluciones integrales de seguridad, siguen incrementando su penetración y ya representan el 34% de las ventas. En este sentido, cabe destacar la fuerte demanda de soluciones safety que favorecen la implantación de estas soluciones de seguridad en los clientes.
En relación con la rentabilidad de las operaciones, se ha mantenido la mejoría en los márgenes como consecuencia del ajuste de los costes operativos y el incremento de los ingresos procedentes de servicios de mayor valor añadido. Como resultado, Prosegur Security ha reportado un EBITA de 41 millones de euros, un 0,4% más con respecto a los nueve primeros meses de 2019. El margen EBITA ha avanzado desde el 2,6% al 3,1% en el período.
Prosegur Alarms
Prosegur Alarms, unidad de alarmas residenciales y para negocios, registró unas ventas de 151 millones en los nueve primeros meses de 2020. Esta cifra supone un 26,3% menos que el mismo período del año anterior. La reducción del volumen en la facturación se debe fundamentalmente a la desconsolidación de España y la tasa de cambio negativa en Iberoamérica. En cualquier caso, la unidad ha registrado un crecimiento orgánico superior al 13%, a pesar de la persistencia del parón comercial en varias geografías.
Prosegur Cash
Prosegur Cash, la filial de logística de valores y gestión de efectivo, ha alcanzado unas ventas de 1.140 millones de euros en los nueve primeros meses de 2020, lo que representa un 14,8% menos con respecto al mismo período del año anterior. La facturación en moneda local (incluyendo orgánico e inorgánico) vuelve a mostrar un buen comportamiento y crece un 1,3%, a pesar del menor nivel de actividad como consecuencia de la COVID-19. Las divisas, especialmente en los mercados emergentes, han continuado experimentando una tendencia desfavorable. Por otra parte, las ventas de Nuevos Productos ya representan un 18,2% de los ingresos en el período y siguen mostrando una fuerte resistencia frente al contexto de la pandemia.
El EBITA de Prosegur Cash en los nueve primeros del año, que alcanzó los de 133 millones de euros y un margen del 11,6%, recoge el coste de implementación de los planes de eficiencia puestos en marcha durante el segundo trimestre del año.